Centenares de profesores afiliados a la Asociación de Educadores del Atlántico, Adea, se concentraron este martes en la sede de la Clínica General del Norte en el barrio Los Andes en protesta por lo que llamaron “pésimo servicio” de esa entidad con la que tienen contratada la prestación de los servicios médico asistenciales,

Isaías Olmedo y Robinson Bolaños se encadenaron a la entrada de la IPS contratada para prestar los servicios médico asistenciales al magisterio del Atlántico.

El primero señaló que por el contrato con la Clínica General del Norte, "los docentes se están muriendo".

"Estamos en esta protesta de 48 horas por ese pésimo y mal servicio de la prestadora Clínica General del Norte, un contrato oneroso pagado anticipadamente mes a mes y los maestros se están muriendo. Los pensionados del magisterio".

El segundo, declaró a Zona Cero, que se optó por parar debido a la demora en la atención de especialistas que tarda entre 5 y 6 meses para dar una cita, “cuando hay agenda”. Lo llamó “el baile del indio”.

En medio de la protesta y mientras sus compañeros se manifestaban frente a la sede de la Clínica General del Norte, Galicia Rodríguez, una docente que sufre de hipotirodismo, salía indignada de la entidad porque no le entregaron los medicamentos.

Hablando de su caso particular, pues necesita un monitoreo permanente, señaló que las citas al especialista oscilan entre los 6 y los 8 meses, y de remate, “nunca hay medicamentos”. “Debieron dármelos en julio y ya llegamos a agosto”.

Alberto Ortíz, presidente de la Adea, dijo que el paro de 48 horas, es porque se llegó a un punto inadmisible. “La precarización del servicio de salud a los maestros es cada vez más evidente”, finalizó.